FUNDEA reforesta comunidades rurales para un futuro sostenible
Anunciando su reciente proyecto de reforestación, FUNDEA consolida su compromiso con la responsabilidad ambiental y la resiliencia climática, buscando así concretar su compromiso constante con la preservación del medio ambiente y la promoción de prácticas sostenibles. En la actualidad, la sostenibilidad es uno de los ejes que están impulsando las empresas en Guatemala, considerando los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
La reforestación busca abordar diversos desafíos ambientales y contribuir a la sostenibilidad del sistema. Destacando su capacidad para purificar el aire, mediante la absorción de dióxido de carbono (CO2) y desempeñando un papel crucial en la disminución de este gas de efecto invernadero, junto con la mitigación del cambio climático. Este proyecto de reforestación colaboro con más de 48 agencias por todo el país, en 10 comunidades, incluida el área protegida Los Encuentros en Sumpango, Municipio de Unión Cantinil, Las Lomas Chiquimula y culminando en las Aldeas San Antonio las minas y Los Potreros, Zaragoza, Chimaltenango.
Los logros destacados de esta iniciativa de reforestación se traducen en acciones concretas y duraderas. ● FUNDEA logró la plantación de un total de 1,592 árboles en las áreas designadas. ● Además de la plantación, se llevaron a cabo charlas educativas para compartir conocimientos y concienciar a las comunidades locales sobre la importancia vital de la conservación del medio ambiente y la biodiversidad. ● Durante estas sesiones educativas, los participantes se sumergieron en la importancia vital de la conservación del medio ambiente y la biodiversidad, fomentando así un compromiso colectivo hacia la protección de nuestro entorno.
● Una de las 10 actividades se desarrolló con mayor éxito en la escuela de niños de escasos recursos Escuela Oficial Rural Mixta Caserío Potrero Grande, Palencia, durante la jornada de reforestación se llevó un mensaje educativo sobre la importancia de conservar el medio ambiente para nuevas generaciones. ● Sostenibilidad a largo plazo estableciendo planes de seguimiento y cuidado de los árboles plantados para asegurar su supervivencia y desarrollo a lo largo de los años. Para reforestar un terreno baldío por la tala indiscriminada, por un incendio o por la deforestación a causa del cambio climático hay que trazar un plan. La reforestación ha de ser sostenible, es decir, no se trata de plantar árboles arbitrariamente. A continuación, repasamos las principales cuestiones a tener en cuenta: Realizar un estudio de campo Antes de nada, hay que estudiar el terreno y comprobar las condiciones del lugar: desde el suelo —profundidad, textura, fertilidad— al clima —temporada seca o húmeda (es indispensable que haya humedad)— o al tipo de población que habita en el ecosistema —fauna y flora autóctona—. Elegir las especies repobladoras Lo más recomendable es optar por especies autóctonas, pero también pueden incluirse especies importadas de crecimiento rápido que sean compatibles con el suelo y el clima. El germoplasma forestal ha de ser de buena calidad y lo ideal es que el vivero de procedencia se encuentre a no más de 100 kilómetros. La forma y el momento del transporte también son importantes, evitando el sol o las fuertes corrientes de viento. Optar por un método de plantación Hay que preparar el terreno, elegir las herramientas adecuadas y optar por la técnica menos invasiva. Además, debemos tener en cuenta la altura y cobertura de cada nueva planta para que no se perjudiquen entre ellas.
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