Riesgo para viviendas e infraestructura en alrededores del volcán de Agua
En el segundo semestre del año 2024, las áreas en las cercanías del volcán de Agua se consideran en una situación potencial de alto riesgo para viviendas e infraestructura, debido a las condiciones del área afectada recientemente por los incendios forestales entre febrero y mayo de 2024, en combinación con los pronósticos para la temporada de lluvias 2024.
El volcán de Agua está incluido en el grupo de alta peligrosidad y ocupa el noveno lugar del Ranking de Peligrosidad Volcánica elaborado por INSIVUMEH en 2020, pero ocupando el primer lugar en cuanto al factor de exposición de población e infraestructura a las amenazas volcánicas.
Ocurrencia previa de eventos de lluvia extrema y flujos de lodo en el volcán de Agua.
Se elaboró un catálogo de eventos de lluvia extrema, inundaciones y flujos de lodo, reportados para el área del volcán de Agua desde 1541. De los 27 eventos de lluvias intensas recopilados, al menos 21 (78%) generaron “inundaciones” en el área del volcán de Agua, y por lo menos 10 u 11 (37%) de estos eventos también produjeron flujos de lodo de lo cual por lo menos 6 (22%) de ellos están reportados en las mismas faldas del volcán. Estos datos dan una idea de las probabilidades condicionales, es decir, debido a que haya lluvias intensas en el área del volcán de Agua, la probabilidad condicional para que se generen flujos en los flancos se estima, como mínimo, entre 22-37%
Los flujos de lodo en el volcán de Agua debido a la tormenta Agatha (29-30 de Mayo 2010) generó extensos flujos de lodo que causaron daños y muertes en las comunidades de San Miguel Escobar (4 muertos según CONRED), Palín (3 muertos según CONRED), y en Santa María de Jesús (7 muertos – sin confirmar si era por flujos de lodo) además de daños también a autopista Palín-Escuintla, y la RN-14. La tormenta Agatha puede servir como evento referencia, en un escenario de lluvias extremas. La barranca que probablemente condujo el flujo de lodo que causó el desastre del 10 de septiembre de 1541(hoy día en San Miguel Escobar, Ciudad VIeja), conocida localmente como Barranca San Pedro, también condujo flujos de lodo en por lo menos dos ocasiones más en 1718 y el 2010 y tiene alta probabilidad de ser impactado en eventos en el futuro. San Miguel Escobar es uno de los centros de población con un nivel de exposición a la amenaza de flujos de lodo relativamente alto.
Recomendaciones urgentes a municipalidades de Antigua Guatemala, Escuintla, Palín, Ciudad Vieja, Alotenango, Santa María de Jesús:
• Trabajar en el corto plazo, estrategias de prevención como alertas tempranas a nivel comunitario y planes de respuesta local que incluya los siguientes puntos:
• Crear una campaña de información y sensibilización sobre el riesgo a las comunidades expuestas, que incluya: la información del riesgo en distintos escenarios, y los planes de cómo se alertará y evacuará a la población
• Organizar los aspectos logísticos y de recursos materiales necesarios para la evacuación, incluidos: transporte, albergues, comida etc., tal que, al darse la crisis, esto estén disponibles de forma inmediata y efectiva.
• Coordinar acciones municipales que promuevan un manejo apropiado de basura y desechos, ya que estos puedan generar un mal funcionamiento o bloqueo de canales de drenaje en las faldas del volcán.
• Coordinar acciones interinstitucionales para iniciar o fortalecer el proceso de recuperación de la vegetación y bosque en la parte alta del volcán de Agua.
A Dirección General de CAMINOS y COVIAl:
• Estudiar y/o evaluar la vulnerabilidad de las obras hidráulicas de drenaje y estructuras para el cruce de barrancas (e.g. puentes), de las carreteras expuestas a flujos de lodo, en los puntos críticos. Además, se recomienda:
• Hacer un inventario de estas obras, obteniendo sus características más relevantes, como el área de sección transversal, y que pueda compararse con las de los flujos de lodo esperados en distintos escenarios.
• Realizar un análisis costo-beneficio de las reparaciones o incluso de las mejoras que pueden realizarse para reducir la vulnerabilidad de las infraestructuras a los flujos de lodo, frente al costo de reparaciones adicionales y posiblemente más extensas en el caso probable de que se produzcan nuevos flujos de lodo.
• Tener un plan para reducir el impacto en el transporte y movilidad de las personas en caso de que sea interrumpido el tráfico en esas carreteras (e.j. rutas alternas, etc.).
• Supervisar que cualquier estrategia o plan de construcción realizada como parte de la recuperación de los sucesos de junio-julio no contribuya a aumentar el riesgo y los impactos en el futuro, y sea adecuada para los escenarios de peligro que pueden esperarse
El Volcán de Agua es un estratovolcán de gran tamaño, ubicado entre los departamentos de Escuintla y Sacatepéquez. Aunque no ha tenido actividad volcánica en los últimos 500 años, ha sido lugar de varios desastres relacionados con flujos de lodo. El volcán se encuentra cercano a las ciudades de Antigua Guatemala (10 km) y Escuintla (18 km) y varias poblaciones se encuentran a menos de 10 km, incluyendo Alotenango (24,000 habitantes), Ciudad Vieja y San Miguel Escobar (27,000 habitantes), San Pedro Las Huertas (5,000 habitantes), San Juan del Obispo (4,500 habitantes), Santa Maria de Jesus (16,000 habitantes), Palin y sus áreas suburbanas (48,000 personas), agrupando todas estas áreas y otras poblaciones en las cercanías del volcán de Agua, suman un total de 175,000 personas, según datos de población estimada del proyecto WorldPop (https://www.worldpop.org/ ). Con base a registros históricos, se conoce que el volcán puede generar flujos de lodo, asociados a lluvias intensas y prolongadas. Debido a que los flujos de lodo pueden también contener un alto porcentaje de bloques de roca y restos de árboles, a menudo también se les define como flujos de escombros.
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